Sin Recetas
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Cocina de familiaUn año atrás Sin Recetas era una banqueterÃa especial, llena de colores, aromas y sabores que iluminaban cualquier evento. Hoy se tra…
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Buenisimo! Salimos a tomar desayuno sin esperanza de encontrar algo tan tela, desayuno campestre que alcanza para dos fácilmente. Todo rico, expresso …
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Lindo lugar, pero para un menú de almuerzo se demoraron 1 hora en traer la comida. Me decepcionó que la lasaña después de una hora, es la lasaña más p…
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Sin Recetas is open for Quick Bites. Sin Recetas serves Home-made and Pastry dishes. Incorrect or missing information? Make a report, or claim the restaurant if you own it!Details
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4 Reviews on “Sin Recetas”
Cocina de familiaUn año atrás Sin Recetas era una banqueterÃa especial, llena de colores, aromas y sabores que iluminaban cualquier evento. Hoy se transformó en un local que alberga toda la pasión de este matrimonio por la comida casera y encanta a quien quiera probarla en pleno corazón de Vitacura. Las vidas de Javiera Gatica y Alberto Telias se cruzaron cuando ambos trabajaban en la PastelerÃa Manjares y desde entonces no se separaron más, menos cuando en 2007 decidieron casarse. Al poco tiempo comenzaron su negocio de banqueterÃa basado en las habilidades pasteleras de Javiera y expertice en cocina de Alberto, quien aprendió las mejores técnicas trabajando en Europa y proviene de una reconocida familia de foodies. Sin embargo, todo el encanto de sus preparaciones y decoraciones necesitaba un espacio que les rindiera tributo. Recién hace un mes abrieron en Manquehue Norte las puertas de una casa, que si bien está adaptada para ser un restaurante, es como un segundo hogar para los que quieran probar la mano de este matrimonio. Este sitio además de ser acogedor y parecer una casita de campo, está pensado perfectamente para estos dos maestros de la cocina. Abajo Alberto tiene su espacio, donde desarrolla a diario un delicioso menú casero con toques gourmet y alguna que otra sorpresa que tienta a los comensales. En el segundo piso, Javiera tiene un taller de pastelerÃa que parece de cuento, el sueño de cualquier repostera para dar rienda suelta a la creatividad.Aquà todo se puede llevar, esa es la gracia, incluso el menú. Los dueños se adaptan a las necesidades de sus clientes, que pueden probar donde quieran su legendario tres leches o los deliciosos platos que van desde pastas, pescado, pollo y lo que el mercado provea en cada estación, por ejemplo, hay una opción especial para vegetarianos igual de rica que el resto.Sacar adelante este local no fue fácil, estuvieron un año y medio trabajando en él, pero el resultado refleja la pasión, el amor y la dedicación que tiene esta pareja por este trabajo al que se dedican de lunes a domingo sin parar.Además este lugarcillo tiene otras sorpresas como clases de cocina dulce y salada. Lo mejor es que son sus propios alumnos quienes deciden qué quieren aprender y lo hacen a su propio ritmo. Aquà todo se adapta de acuerdo al corazón, no hay recetas solo una: la familia.
Buenisimo! Salimos a tomar desayuno sin esperanza de encontrar algo tan tela, desayuno campestre que alcanza para dos fácilmente. Todo rico, expresso muy bueno.
Lindo lugar, pero para un menú de almuerzo se demoraron 1 hora en traer la comida. Me decepcionó que la lasaña después de una hora, es la lasaña más pobre que he comido: tenÃa una sola capa de pasta y con varios bordes quemados. Los postres se ven deliciosos, pero también me esperaba más. El brownie tenÃa poco sabor a chocolate y el cheescake de chocolate era pesadito, rico pero pesado.La limonda muy buena.
Este lugar siempre me sorprende! Voy a almorzar con gente de la oficina, los jugos naturales y el espresso nunca fallan.Los menú son diversos todas las semanas y como también es pastelerÃa fina, los postres no se pueden evitar.Lo recomiendo mucho para almorzar rico y muy tranquilo. Atendido por sus propios dueños.